Subiendo por la calleja
tristes los hermosos ojos
de la mocita morena,
llenos de luz que se apaga
los profundos de la vieja.
Son dos mundos contrapuestos
unidos a una cadena.
Dos pozos negros
son los ojos moros
de la niña triste.
Dos lumbres vivas
son los otros ojos
de la leña vieja,
caminan juntas
apareaditas
y tienen mil quejas.
La leña quiere a la rama
pa no quemarse en la hoguera
y la ramita se queja
de sus soledades negras.
Y yo soy viento que pasa
y recojo sus mareas.
Nuera y suegra
suegra y nuera.
La una se agarra a la vida
porque ve que se la escapa,
sirviéndose de la joven
pa que le sirva de estaca.
Que injusticia madre mía
el hijo por esos mundos
disfrutando de la vida
y la nuera amarraita
a la suegra de por vida.
Subiendo por la calleja
tristes los hermosos ojos
de la gitana morena,
llenos de luz que se apaga
los de la gitana vieja.